lunes, 24 de septiembre de 2012

Resumen 5º Café Filosófico de Albacete (22/09/12): DETERMINISMO Y LIBERTAD

Tras el pasado sábado 22 de Septiembre no podría estar más contento por los resultados de las reuniones que, desde junio de este año, venimos realizando en torno a los problemas que por largo tiempo han preocupado a nuestra especie. Y por si lo anterior fuera poco ―que a mi juicio no lo es―, la actualización de dichos problemas, es decir, la reflexión sobre su importancia en el presente, no deja de recordarnos el objetivo principal de esta actividad: que pensar aquí y ahora es muy importante para vivir mejor. Por eso un día más reitero mi agradecimiento a los diecinueve asistentes a esta quinta reunión y a todos aquellos que, en la distancia (por no haber podido asistir, fueran cuales fueran las circunstancias), nos apoyan y nos animan. Gracias.

A lo dicho, tengo que sumar mi agradecimiento por la puntualidad de los asistentes, que nos permitió comenzar antes que el resto de los días y que, además, permitió que todos y todas escuchasen las normas, métodos y objetivos de la actividad, mejorando en consecuencia la calidad del diálogo.

Y finalmente quisiera añadir, antes de comenzar con el resumen propiamente dicho, que la elección del tema de la próxima sesión, que tendrá lugar el próximo sábado 20 de Octubre en el Embrujo de Granada de 19:00h a 21:30h, se realizará por encuesta, que permanecerá abierta hasta las 23:59h del domingo 7 de Octubre, y contará con las siguientes cinco opciones, pudiendo votar sólo una por persona: 1) Lenguaje; 2) Tabúes; 3) Educación; 4) Normas; 5) Relación fe/razón. Como de costumbre, una vez la encuesta quede cerrada se dará más información sobre la próxima sesión en este blog. Además, a partir de ahora también podéis encontrar, a la derecha en esta página, la sección "¿Quieres escribirnos?" donde se encuentra la dirección de correo electrónico a la que ya podéis enviar vuestras sugerencias, críticas, comentarios, etc. Ésta es cafe.filosofico.albacete@gmail.com. Ahora sí, ¡vamos con el resumen!


Determinismo y libertad

En primer lugar me parece oportuno recordar dos cosas fundamentales respecto a este resumen: la primera es que cualquier "conclusión" a la que llegamos en el Café, aunque resultante de un compromiso colectivo con la búsqueda de la verdad, no pretendemos entenderla como "la verdad definitiva"; y la segunda es que, dada la dificultad/improbabilidad/imposibilidad de hallar esa "verdad definitiva" a la que una reunión de dos horas y media no puede aspirar, el objetivo del Café es ser germen de futuras reflexiones personales al término de la sesión y que, por tanto, todo lo escrito en este blog ha de ser interpretado en esos términos, es decir, como aperitivo de las futuras reflexiones que el lector puede llevar a cabo si así lo quiere.

Aunque con modificaciones metodológicas (mediante un breve juego o ejercicio que a mí me gusta llamar "calentamiento filosófico"), las primeras cuestiones a resolver eran, de la misma forma en que las del resto de temas que hemos abordado en sesiones anteriores lo han sido hasta ahora, las definitorias: "¿Qué son la libertad y el determinismo?". Las primeras definiciones ofrecidas fueron:

― Libertad = lo que se puede hacer/escoger/controlar. Lo que depende de uno mismo.
― Determinismo = lo que no se puede hacer/escoger/controlar. Lo que no depende de uno mismo.

Una vez creíamos haber resuelto las anteriores cuestiones apareció ante nosotros la no menos importante cuestión de "¿Existen el libre albedrío y/o el destino?". Y dado que nunca llueve a gusto de todos, y ante la diversidad de respuestas, recojo a continuación las que considero más representativas. Para resolver ambas cuestiones no tardó en distinguirse: por un lado, libertad y determinismo en un sentido absoluto; y por otro lado, libertad y determinismo en un sentido relativo. Para entendernos:

― Hablaremos de que existirá o no la libertad (o el determinismo) en un sentido absoluto y de acuerdo con las anteriores definiciones teniendo en cuenta si somos capaces de hacer/escoger/controlar todo cuanto se presenta ante nosotros.
― Y hablaremos de la misma cuestión en un sentido relativo teniendo en cuenta que existen limitaciones, márgenes que no podemos cruzar, pero dentro de los cuales se abren los cauces que podemos navegar, y a estos cauces los llamamos libertad.

Tras lo dicho, será fácil que el lector entienda que hablando en un sentido absoluto del determinismo y la libertad, la balanza se incline por un fuerte determinismo, negando la libertad. Por poner un ejemplo que aclare esto último, no hay ninguna acción ante la que pueda considerar que somos totalmente libres, pues siempre nos veremos condicionados por factores que se escapan a nuestro control, por circunstancias que no hemos escogido. Una forma de entender el determinismo en un sentido absoluto es, tal y como lo expresaba un asistente, decir que "vivimos en Matrix" (controlados por causas y efectos que se relacionan matemáticamente, sin salida). Queda pues, para hablar de la libertad, sólo abierta la posibilidad de hacerlo en base a su definición en un sentido relativo, o lo que es lo mismo: sólo podemos hablar de libertad si lo hacemos en estrecha relación con su término aparentemente opuesto, el determinismo. Para hacernos una idea de esto último, podríamos acudir a la metáfora de la paloma que emplea Kant para hablar de la libertad: la de aquélla que alza el vuelo y piensa lo alto y veloz que volaría si el aire y el viento no frenasen su avance, no dándose cuenta de que sin éstos le sería imposible volar. Otro ejemplo sería la frase de Ortega y Gasset de "Yo soy yo y mis circunstancias; y si no las salvo a ellas no me salvo yo" pues, ¿de qué manera podríamos hablar de libertad sin tener en cuenta aquellas circunstancias dentro de las cuáles se presentan todas las opciones?

A partir de este punto en el que escogimos que la libertad se haya condicionada por múltiples factores, que antes hemos tenido a bien llamar "determinismo" (en singular) y que ahora se revela como una multitud de circunstancias que nos condicionan, que determinan la amplitud de esa libertad o libertades, quedaba señalar algunos de ellos, como pueden ser: el tiempo, el espacio, la biología, la psicología, la cultura y la sociedad. Paso a describir sucintamente lo dicho en cuanto a cómo nos determinan estos factores.

― Es innegable que estamos sujetos a unas condiciones espacio-temporales que no hemos escogido y que influyen tanto en lo que nuestra vida es como en lo que podrá convertirse (circunstancias geográficas, históricas,...). También la dimensión temporal nos ofrece una definición del destino como predicción del futuro y otra de la libertad como futuro imaginado y todavía inexistente, como posibilidad en el presente.
― Innegable parece también que la biología y la psicología influyen en nuestras posibilidades vitales. En lo que respecta a la biología tenemos necesidades que satisfacer, unas capacidades más desarrolladas que otras, algunas atrofiadas, otras de las que carecemos...; en lo que respecta a la psicología, no todos los procesos importantes son conscientes, sino que muchos de ellos ni siquiera los percibimos, y además nuestros sentimientos y emociones juegan también papeles importantes en las decisiones que tomamos.
― La cultura y la sociedad determinan algunos de nuestros conocimientos, nos ofrecen unas leyes morales y jurídicas en torno a las cuales construimos nuestra vida como individuos, como miembros de esa sociedad y cómo no-miembros de otras sociedades y/o culturas. Las sociedades, los demás individuos añaden algo nuevo y diferente a la cuestión de "qué puedo y qué no puedo hacer", ésto sería "qué me dejan y qué no me dejan hacer".

Una vez dicho lo anterior, pasamos a preguntarnos algo mucho más concreto: "¿Qué grado de determinismo y libertad existe hablando en términos morales?". En otras palabras lo anterior podría formularse de la siguiente manera, como decían algunos de nuestros asistentes: "Vale, plantearse el libre albedrío y el destino como cuestiones teóricas está muy bien y puede ser algo muy bonito pero, veamos, ¿qué repercusiones tiene  para la vida práctica, para la vida moral?". A este respecto, y también de modo sucinto, queda recogido lo más significativo de cuanto se dijo:

― Podemos creer que somos libres o que estamos predestinados, ¡pero no podemos comprobarlo (como decía Kant)! Ante una u otra creencia hay distintas consecuencias morales: por un lado, creerse libre y creer libres a los demás es condición de posibilidad (hace posible) de la moralidad; por otro, creerse predestinado a hacer algo es abandonarse a la cosificación, pues al igual que las cosas inertes te sientes arrastrado por una causalidad lineal (una determinada causa tiene un único efecto posible). En otras palabras, sólo si hay libertad podemos imputar a los demás responsabilidad por sus actos. En consecuencia, la libertad implica responsabilidad.
― A lo anterior se le podría añadir algo que, en otro momento, un asistente dijo sobre la libertad: "la libertad es un acto consciente y voluntario".
― Alguien decía, en contra de la idea de una libertad en sentido absoluto (entendida como queda definida al comienzo del resumen) que la libertad no es sólo la capacidad de conseguir o no conseguir hacer/escoger/controlar tal o cual cosa, sino la capacidad de intentar hacerlo, se consiga o no.
― Otro asistente apuntaba que la libertad no queda determinada por la cultura ni por el conocimiento, pues habita en todas las personas la capacidad de elegir, de hacer y de intentar hacer (tal y como mencionaba en el punto anterior) aun no sabiendo qué significa la palabra "libertad" e incluso no sabiendo que existen otras opciones para su acción. Esta libertad podría llamarse "libertad radical", entendiendo por radical el adjetivo que hace referencia a la palabra "raíz", al comienzo, al origen, al germen. Otra asistente decía lo mismo de la siguiente forma: "El hombre es más libre de lo que cree ser".
― Otro asistente reflexionaba, tras haber discurrido el diálogo durante unos minutos en torno a si se puede hablar de libertad o de voluntad en los animales, que "podemos tener más libertades de las que tiene un pájaro gracias a nuestras cadenas". Traducida la metáfora esto no querría decir otra cosa que, gracias a muchas de nuestras renuncias, obligaciones y deberes, podemos acceder a nuevas libertades, a nuevas posibilidades.
― En relación a un tema ya tratado en otra reunión, LA FELICIDAD, se valoraba la relación que existe entre ser libre o ser esclavo y ser feliz. "Ser libre es incómodo, es difícil", se decía. Y se añadía: "Y por si fuera poco, estamos condenados a ser libres; la vida consiste en elegir constantemente, la vida es un quehacer constante". Se escuchaba: "Ser libres nos da miedo. Todos buscamos un buen señor al que servir."

Atendiendo a lo expuesto, fruto del diálogo mantenido el pasado sábado, obtenga el lector sus propias conclusiones y reflexione hasta hallar nuevas respuestas; una vez hecho lo anterior continúe el proceso hasta encontrar nuevas preguntas. Y para no hacerlo en solitario, no deje de visitarnos en próximas ocasiones si todavía no ha tenido la oportunidad (o no ha decidido aprovecharla).

Sin nada más que decir, cedo la palabra a las recomendaciones de libros y películas que los asistentes hacen en relación con el tema de esta sesión. Recuerdo a quienes han hecho estas recomendaciones que pueden enviar sus particulares reseñas sobre los títulos recomendados al correo del café.

LIBROS Y PELÍCULAS:

El clan del oso cavernario, Jean M. Auel.
Madame Bovary, Gustave Flaubert.
Martin Eden, Jack London.
1984, George Oswell.
― Fahrenheit 451, Ray Bradbury.
Hacia rutas salvajes (Into de Wild), libro de Jon Krakauer y película de Sean Penn. Sinopsis y críticas de la película en filmaffinity
La naranja mecánica, libro de Anthony Burgess y película de Stanley Kubrick. Sinopsis y críticas de la película en filmaffinity
Mi nombre es Khan, película de Karan Johar. Sinopsis y críticas de la película en filmaffinity
Matrix, película de los hermanos Wachowski. Sinopsis y críticas de la película en filmaffinity

¡Gracias por vuestra atención, salud, alegría, y hasta pronto filocafeteros!

2 comentarios:

  1. Interesante! Me quedo con lo último. Si la libertad es una condena, o sea un castigo, el castigo se nos impone. Si la libertad es en cuanto a que existe el determinismo, sería una paradoja. En conclusión, yo no podría ser libre de elegir no ser libre!

    Mi asistencia al Café filosófico es físicamente imposible jajaja ¡Seguid así!

    Un Saludo

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  2. Deduces bien. Esa paradoja ya fue defendida por Jean-Paul Sartre, de quien es la frase "Estamos condenados a ser libres" y por Ortega y Gasset, quien decía aquello de que "la vida es un quehacer constante".
    Supongo que esa condena, de ser real, sólo acaba con la muerte (cuando parece que ya nada se puede elegir); ¡pero aun así el determinismo continuaría!, pues estarías determinado a no escoger nunca más.

    Muchas gracias por tu apoyo y por filosofar con nosotros a pesar de la distancia.

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